Los primeros días de restricciones mostraron en Ensenada poca actividad y baja circulación de personas y vehículos en las calles céntricas, aunque favorecido por las malas condiciones climáticas.
Pocas pocas personas pudieron verse caminando en la ciudad, especialmente hacia la tarde. Se notaron algunas colas en los cajeros y la clínica privada ubicada sobre La Merced.
El acatamiento de las nuevas medidas oficializadas a través de un nuevo Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) es alto entre los ensenadenses. De acuerdo con las disposiciones, quedaron suspendidas todas las actividades culturales, educativas, sociales, económicas, religiosas y deportivas que se realicen de manera presencial.
En la región solo podrán estar abiertos comercios y servicios considerados esenciales, por lo que los demás deberán volver a volcarse a la atención virtual, como sucedió al inicio de la pandemia de coronavirus y se dispusieron medidas similares para limitar la circulación de las personas y contener el primer brote de la enfermedad.
