Enorme preocupación por la propagación de enfermedades
Desde hace varios días, el primer piso del Hospital Horacio Cestino de nuestra ciudad, que alberga nada más y nada menos que a las salas de internación común, como maternidad y terapia, recibe indiscriminadamente la visita de decenas a cientos de personas que concurren a realizar trámites administrativos.
La absurda situación, tristemente propia de un sketch de “Peter Capusotto”, se da gracias a la increíble imaginación o impericia de autoridades provinciales y nacionales. Hace ya un par de semanas por aparentes (al menos es lo que se anunció oficialmente) refacciones generales en las oficinas que la ANSES ocupaba en calle La Merced, frente al Banco Provincia, el enorme flujo de asistencia diaria de vecinos está siendo derivado al piso de internaciones del Cestino o en parte a La Plata.
¿CIERRE DE LA AGENCIA?
En un primer momento, el revuelo generado dentro de la misma ANSES Ensenada y hacia afuera, fue por la sensación de que el cierre de la UDAI local pudiera ser permanente o definitivo, desarticulando esta importante herramienta del Estado Nacional en territorio ensenadense por ser del “kirchnerismo”.
La resistencia de trabajadores del organismo y sobre todo de los propios decenas de miles de usuarios o beneficiarios de diferentes Derechos que garantiza esta repartición, hizo que se tuviera que tomar una decisión al respecto. Claro que, seguramente, no ha sido de las más creativas, sino todo lo contrario.
SILENCIO HOSPITAL
“Alguien ha tenido la deslumbrante idea de exponer a los internados del hospital al paso de cientos de personas por día sin ninguna medida de salubridad, y a esas mismas personas, gente mayor, embarazadas o chicos muy chicos que vienen a hacer trámites, a la posibilidad de contagios que pueden suceder en cualquier hospital”. Esta fue una de las frases categóricas que se escucharon durante una recorrida de Semanario Fuerte Barragán por el piso de internaciones del Hospital Cestino. Por allí, también era lamentable ver la escena de enfermeros pasando con internados, en camilla, entre la cola de vecinos que se ven obligados a tener que hacer hasta horas de espera para ser atendidos en la resolución de sus temas relacionados con ANSES.
TODOS AFECTADOS
Así las cosas, este Semanario intentó recabar testimonios de las partes afectadas, y haciendo el relevamiento se desprende: las personas internadas, ya sea por maternidad o enfermedades junto a sus familiares y amigos, se encuentran muy preocupados por el increíble desfile de constante de gente ajena al nosocomio. Enfermeras, médicos y asistentes acumulan creatividad para que se pueda seguir brindando condiciones óptimas para garantizar la salud de esos pacientes. Por el lado de ANSES, los trabajadores se encuentran trabajando en la “Capilla” del Hospital (donde ya no se puede ir a rezar por un familiar enfermo) convertida en incómoda oficina y sin siquiera luz natural. Y finalmente, el público habitual de la UDAI Ensenada, se ve expuesto a las patologías más comunes y no tanto que circulan por cualquier centro de salud.
HABITACIÓN DE AISLAMIENTO
De toda la gravedad que puede implicar semejante medida que han tomado los funcionarios del Gobierno Nacional de Mauricio Macri (por ANSES) y Provincial de María Eugenia Vidal (por el Hospital), aún hay más.
Es que la cola de espera del público de la ANSES que diariamente rebalsa los pasillos del Primer Piso del Hospital, pasa justo por la puerta de la “Habitación de Aislamiento”, ubicada también en ese piso, cerca de la capilla. Según los datos recabados por este Semanario, lo más normal que se allí “aísla” son casos de “Tuberculosis” (entre otras tan o más letales, por cierto), que dada la gravedad de esa enfermedad y su fácil contagio, requiere de un apartamiento de los pacientes y no precisamente junto al paso diario de cientos de personas.
Paradójicamente el mayor público de la oficina Nacional allí instalada, corresponde a los llamados “grupos de riesgo” por los organismo de salud, como ser adultos mayores, embarazadas y lactantes.
NUEVAS AUTORIDADES
Seguramente que esta inexplicable medida pueda tener que ver con la llegada de las nuevas autoridades del Hospital Horacio Cestino hace menos de un mes, cuando el Gobierno de Vidal decidió reemplazar a los Directores que continuaban, con el respaldo Político de Ensenada, desde la gestión Scioli.
Aparentemente, la puja Política se traduce a estos sectores, donde la Gobernadora de Cambiemos, el Pro y Macri, ha impuesto a dos odontólogos ensenadenses al frente del nosocomio, uno de ellos Adolfo Pomini, ex titular hace más de 15 años durante la Gestión Del Negro; y a Jorge Gutiérrez quien posee consultorio frente a Plaza Belgrano y ha sido Presidente de Rotary y del Club Regatas.
Junto a ellos, se desempeña también como Directora Asociada, Analía Carassale (cercana a la Gobernadora Vidal) que según se comenta dentro del Hospital sería “la que manda”. Claro está que nadie ha confirmado de quién ha sido esta lamentable idea de llevar la ANSES y su afluencia de público al Hospital.
